Película de Daens, el sacerdote

     Durante la semana pasada estuvimos viendo en clase una película de la época de los principios del s.XIX titulada Daens. 

     Hemos querido hacer un análisis a partir de la información obtenida sobre las condiciones laborales y sociales de la época y contrastarla con lo visto en la película. 

     La verdad es que hay escenas de la película bastante impactantes que reflejaban en cansancio de los trabajadores los cuales les podía llegar a provocar hasta la muerte por cerrar durante unos segundos los ojos utilizando las máquinas de las fábricas, que en este caso eran de textiles. Gracias a los avances sociales y a las reivindicaciones, actualmente esto solo pasa en algunos países del tercer mundo. Las grandes multinacionales someten sobretodo a mujeres y niños a duras horas de trabajo bajo un salario mínimo con tal  de producir con bajos costes, aunque luego inflan los precios con la escusa de que el producto el "de marca".

      La prensa de la época jugaba un papel informador. Los únicos que sabían leer eran los ricos, los clérigos y algunos repartidores de periódicos, aunque estos lo hacían con dificultad, pero podían transmitir a los obreros lo que figuraba en la prensa cada día.

      Las condiciones laborales en general eran pésimas. El salario era mínimo, y por cualquier tipo de negligencia que cometiera en obrero en la fábrica se les hacía pagar una multa. Las condiciones higiénicas eran escasas, siempre iban sucios a su puesto de trabajo, del cual salían igual o peor, y siempre llevaban la misma ropa. Los baños de los obreros eran insalubres, como una especie de parterres en los cuales hacían sus necesidades conjuntamente hombres y mujeres, y luego se limpiaban con papel de periódico o lo que tuvieran a mano en el momento. En cuanto a la jornada laboral, trabajaban como mínimo 14 horas diarias, la mayoría empezando a las 6 de la mañana y finalizando a las 6-7 de la tarde, con escasos descansos. La seguridad en el trabajo era mínima, que añadida a el cansancio de los trabajadores, como ya expliqué antes, producía la muerte de múltiples trabajadores, mayoritariamente niños que se quedaban trabajos en las máquinas al recoger los trozos de bobina que caían al suelo. Algunas de las empleadas mantenían relaciones sexuales con el vigilante de la fábrica con tal de una subida de sueldo, pero en algunas secuencias de la película se produce la violación de una de las protagonistas. 

        Las causas que explican las condiciones de los obreros es el abuso del poder de los ricos, y también el pasotísmo que adoptaba la Iglesia de la época que apoyaba indudablemente la postura del Estado.

       Los patronos que eran ricos no daban ninguna explicación a la explotación que sometían a los obreros. Lo único que hacían eran callarlos mínimamente sobornándoles con pequeñas subidas de sueldos o ofreciéndoles alimentos para callar las amenazas de los socialistas. 

           Los otros agentes sociales que se proponen como mediadores del conflicto son los sacerdotes, que muestran una actitud muy conservadora y no apoyan las reivindicaciones de los trabajadores. Pero Daens, que era un mínimo representante del gran grupo de la Iglesia llevó a cabo una gran labor social.  Luego está el proletariado de tendencia comunista y la prensa que también ejerce un instrumento de presión y difusión de las ideas de Daens.

            El papel que desempeña el Estado, es decir el parlamento belga, es ir en contra de Daens, manipulándolo y teniéndolo controlado. El parlamento convoca elecciones y aunque manipulan los votos del proletariado Daens sale ganador. La Comisión Investigadora tenía como objetivo controlar a Daens y poner fin a su protesta.

           La Iglesia Católica juega el papel de oponerse a cualquier reforma que beneficie a los obreros y pueda peligrar su posición, poder y prestigio, y se muestra prepotente, agresiva y tramposa. Pero Daens, aunque tenga que ser por su propia cuenta, lucha y consigue lo que se propone, a pesar de las continuas amenazas que recibe de “sus compañeros”.

          Por último, opinamos que Daens quiere decir a los obreros con esta frase: " El enemigo es aquel que explota y el amigo el que sufre con nosotros y cerca de nosotros"   que la clave de todo está en permanecer unidos, mostrando complicidad y fortaleza; porque si hay algo que tienen en común es que persiguen y luchan contra lo mismo: demandan una vida digna en todos los sentidos, y para eso es necesario e imprescindible enfrentarse a su enemigo universal, la Iglesia Católica.